De las palabras a los hechos hay trecho

Ayer, quede algo perplejo, no voy a decir sorprendido pero bueno, dejemoslo en perplejo que suena bien. Leia la portada de un periodico que decia bien claro «El cáncer de mama se va a poder curar con fármacos y sin cirugía». Rápidamente con gran expectación y alegria me apresure a abrir la hoja en la que comenzaba el articulo. Alegria y precaución a la vez, ya que el subtítulo era el siguiente «La incidencia está aumentando en las mujeres jóvenes» Este artículo era una entrevista al Dr. que coordina la Unidad de Mama de Onkologikoa y preside el comité organizador del XXX congreso de la Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria, que comenzará en San Sebastián el próximo jueves y terminará el sábado.
Según iba leyendo la entrevista cada vez me iba quedando más atónito con lo que leia. Quizas sea yo, que soy un poco corto o que no entendi bien lo que ponia, pero por si acaso y aprobechando las nuevas técnologias os haré unos corta y pega para saqueis vuestras propias conclusiones.

- No sé si esta entrevista va a ser optimista o pesimista.
- Optimista siempre.
- ¿Hay motivos para serlo? - La enfermedad nunca da lugar al optimismo, pero las soluciones a la enfermedad ahora mismo nos ayudan a ver las cosas con cierta alegría porque cada día estamos más cerca de la solución. Lo que está pasando es que antes esa solución era muy agresiva y hoy en día lo es mucho menos, es menos radical tanto en cirugía como en radioterapia y más selectiva en cuanto a los tratamientos, pero se obtienen resultados similares e incluso mejores.- ¿Qué resultados? - Sobre todo se consiguen menos efectos secundarios, menos morbilidad y una mejor calidad de vida. Por eso creo que hay que ser optimista, no tanto en cuanto a la curación total de la enfermedad, de la que todavía estamos lejos en todos los casos, pero sí en cuanto a que la cronificación de la enfermedad permite ahora mismo conseguir unas tasas de curación altísimas con un nivel de vida extraordinario.- ¿Se avanza también en prevención? - Sabemos desde hace años que la prevención es la clave en el cáncer en general y en el cáncer de mama en particular. Cuanto más cerca de sus inicios encontramos la enfermedad, menos tiempo dejamos para que pueda provocar cualquier tipo de problema irreversible o incontrolable y más nos acercamos al objetivo de controlarla, curarla o cronificarla. ¿A que usted nunca se plantea curar una hipertensión o una diabetes? Es como si tuviera un grano. El cáncer va a convertirse en eso algún día, en una enfermedad crónica que no habremos curado porque todavía no conocemos su causa pero que habremos controlado de tal forma que esta mujer podrá hacer una vida normal olvidándose de que alguna vez ha tenido un cáncer y del estigma que eso supone.- Pero seguirá teniendo cáncer.
- Parece que le pedimos más a ciertas enfermedades que a otras. Todo el mundo está con el colesterol alto, pero nadie va al médico para decirle que le cure el colesterol. Asumimos que tenemos que tomar la pastillita, aunque tenga efectos secundarios, y ya está. Sin embargo, el cáncer parece que lo curamos o se fastidió. Pues no, si no conseguimos curarlo conseguimos controlarlo de tal forma que el paciente puede hacer una vida normal durante muchísimos años o toda su vida. Y eso es mucho.
- Del cáncer conocemos más los casos de personas que se mueren que las que se curan. - Es así. El cáncer tiene históricamente un estigma como sinónimo de lo peor. Parece que como todo el mundo es un poco morboso, al final solo nos enteramos de Lola Flores, Rocío Jurado y toda esta gente que al final se muere de cáncer. Pero mucha gente fallece también de problemas cardíacos, de diabetes o problemas renales. Estos casos parecen una banalidad, mientras que el cáncer no, y sin embargo ahora mismo se cura mucha más gente que la que no se cura.
- Y los que se mueren lo hacen oficialmente de una larga enfermedad, como si ponerle nombre a la causa del fallecimiento fuese una deshonra para el muerto. - Es verdad. Seguimos teniendo miedo a nombrar a esa enfermedad.
- Quienes sí pronunciaron su nombre fueron María San Gil, Uxue Barkos y Esperanza Aguirre. - Todo esto hace que entre dentro de la normalidad que una persona tenga una enfermedad así, que no se esconda. Lo que ellas hicieron ayuda, por supuesto, pero todavía tenemos mucho retraso hasta llegar a considerar el cáncer de mama como una enfermedad como las demás. De alguna forma tenemos que intentar banalizar el cáncer. Yo creo que ahora mismo todos estos testimonios ayudan a que se asuma que es una enfermedad que ocurre con cierta frecuencia y que hoy en día es banal entre comillas, porque posiblemente es mejor tener un cáncer que una enfermedad neurológica. Sin embargo, aún estamos lejos de que esto sea una cosa normal.
- ¿Las mujeres están perdiendo el miedo a descubrir que tienen cáncer de mama? - Ese miedo queda. La mama tiene una connotación psicológica, fisiológica y cultural; somos mamíferos y de alguna forma la mama es nuestra razón de ser porque sin ella no existiríamos los humanos. Cuando piensas que el órgano que te ha dado vida te está dando muerte, de alguna forma lo miras con una connotación muy diferente. Por eso no es lo mismo tener un cáncer de mama que uno de estómago, la vivencia es diferente. En la mama es como si te atacara a tu parte más profunda de tu ser, de tu existencia en este universo, lo que hace que el cáncer de mama sea seguido con mucha más trascendencia, con mucha más gravedad por parte de la paciente.
- Usted ha dicho que el 80% de los cánceres de mama se curan. ¿Este porcentaje irá en aumento con el tiempo? - Globalmente va a ser difícil mejorar esa cifra porque se curan casi todas las mujeres que se diagnostican en una fase precoz, pero con las que no se diagnostican a tiempo es más complicado. Ahora mismo podemos decir que siete u ocho de cada diez cánceres de mama se cura, aunque diez de cada diez se curan si la fase es precoz pero solo sanan tres de cada diez si la fase es tardía.
- Lo que hace falta es perder el miedo y hacerse un análisis.
- Sabemos que muchas mujeres han perdido el miedo porque participan de forma muy activa en las campañas de diagnóstico precoz. Se les convoca de forma voluntaria y más del 85% de las convocadas acuden.- ¿Está disminuyendo la edad de las enfermas?
- Está aumentando la incidencia del cáncer de mama en mujeres jóvenes. Estamos diagnosticando cada vez más casos en personas de menos de 50 años, lo que seguramente nos va a obligar a aumentar el abanico de edades en las mujeres a las que hay que hacer una mamografía. Ahora mismo el programa empieza a los 50 años, pero habrá que bajar a los 45 y en algunos casos se llegará hasta los 40 porque el diagnóstico precoz es importante a cualquier edad.
- Hay quien no opina lo mismo en el Gobierno Vasco.
- Algunos políticos han propuesto bajar a los 45 años la edad de inicio del diagnóstico precoz, la polémica está en que eso es caro y en que el Gobierno Vasco tiene dificultades para asumir ese costo. Lo que está claro es que la incidencia del cáncer de mama en mujeres menores de 50 años está aumentando y habrá que plantearse en un período de tiempo más breve que tarde aumentar la edad de las mujeres en los programas de diagnóstico precoz.
- ¿A qué se debe este descenso de la edad? - No lo sabemos con seguridad. Lo que sí sabemos es que los hábitos de vida de las mujeres han cambiado en los últimos años. La mujer tiene su primer embarazo cada vez más tarde y de alguna forma ya no es ese ser biológicamente preparado para tener hijos desde los 14 o 15 años. Ahora es una persona que decide cuándo quiere tener su primer hijo y seguramente la mama, que es un órgano inmaduro hasta que no tiene su primer embarazo a término, es más frágil y se ve sometida durante años a alteraciones hormonales no previstas en principio por nuestra naturaleza, lo que seguramente hace que provoque enfermedades en la mama.
- De todo ello van a hablar en el congreso que han organizado en San Sebastián - Es la segunda vez que la Unidad de Mama de Onkologikoa organiza este congreso en los últimos diez años, y lograrlo en un mundo tan competitivo como este significa que no hacemos las cosas tan mal y que somos una Unidad de Mama fiable, valorada y contrastada en el Estado. Este congreso es el más importante que ahora mismo se puede organizar a nivel nacional sobre cáncer de mama.
- En él se analizarán las nuevas vías para el diagnóstico de la enfermedad.
- El diagnóstico depende en la actualidad de métodos radiológicos como mamografía, resonancia magnética o ecografía. Hoy en día la baza del diagnóstico precoz es la de intentar buscar métodos radiológicos cada vez más finos que detecten lesiones antes. Ahora la tomosíntesis o el PE de la mama son métodos que parece que nos van a ayudar a hacer diagnósticos cada vez más precoces y, por lo tanto, a mejorar el diagnóstico de la enfermedad.
- ¿Se puede llegar a curar sin cirugía? - La cirugía ha sido hasta ahora un pilar fundamental del tratamiento del cáncer de mama pero cada vez hacemos menos cirugía porque cada vez tenemos diagnósticos más precoces y además nos hemos dado cuenta de que un tratamiento quirúrgico conservador es igual de eficaz que hacer una masectomía. A medida que encontremos fármacos más eficaces la cirugía irá pasando a un segundo plano y seguramente desaparecerá de lo que puede ser el arsenal del tratamiento del cáncer de mama. Cuando acabé la carrera, lo más difícil en cirugía era el tratamiento de la úlcera de estómago, pero apareció un fármaco y desde entonces no se ha vuelto a operar una úlcera de estómago más. Llevamos veinte años así porque apareció un fármaco que cura la enfermedad. Hoy en día estamos en esa fase, estamos encontrando fármacos que van a curar la enfermedad haciendo que la cirugía vaya pasando a un segundo plano.
- Hemos empezado optimistas y terminamos optimistas. Es buena señal. - Cuando se habla de cáncer los mensajes que tenemos que dar los que nos dedicamos a estas cosas tienen que ser positivos, porque para lo negativo ya está lo que se dice por ahí, donde parece que todos saben muchísimo sobre el cáncer, sobre todo de lo que va mal. El lema del congreso sería 'Menos es más'.
- ¿Qué quiere decir? - Que haciendo menos cirugía, menos radioterapia y menos tratamientos de quimioterapia, hoy en día podemos conseguir los mismos resultados de curación de la enfermedad con una menor morbilidad, menos efectos secundarios y una mucha mejor calidad de vida. Es lo que decíamos al principio, igual no podemos curar a una mujer al cien por cien, pero logramos unos resultados que nos acercan al cien por cien y sobre todo nos acercan a que esta mujer pueda vivir haciendo una vida totalmente normal a pesar de la enfermedad.
No se vosotros pero yo después de leer esta entrevista no tengo claro si el cáncer se cura o no en gran mayoria, o si es una enfermedad crónica o como dice al final, que cuanto menos cirugia, radio y quimio mejor.
Si hay alguién que me lo pueda aclarar por favor, diganmelo.
Yo me quedo con lo del aspecto emocional, cambio de estilo de la mujer, etc... Algo bueno tenia que tener.
A! Otra cosa, si es verdad que se curan más cánceres que los que mueren en mi entorno estamos teniendo muchíííííiísima mala suerte.
A! y otra má, todos no tenemos colesterol y, muchos que lo han tenido lo han eliminado a este, y a esa pastilla de efectos secundarios, muchas veces basta con una buena alimentación, cambio de estilo de vida y alguna de esas hierbitas o suplementos que " no valen para nada".
Para terminar. ¿Entre tanto especialista, gente formada y lista, nadie se ha parado a "perder tiempo" en pensar porque cada vez hay más cáncer y en personas cada vez más jovenes y como se podria revertir esta tendencia? Porque lo de mamografias y otro tipo de pruebas llamarlo prevención, pues...

Eskerrik asko